Mitos y creencias erróneas sobre la terapia online

¿Sabías que el 96% de los psicólogos trata o ha tratado alguna vez a sus pacientes a través de la terapia online? Así lo reveló una encuesta realizada por la Asociación Americana de Psicología en el que se encontró, además, que desde el comienzo de la pandemia 3 de cada 10 psicólogos tienen más pacientes. El aumento de la demanda psicológica sumado a las ventajas que brinda la terapia online ha propiciado las condiciones perfectas para que cada vez más terapeutas encuentren nuevas oportunidades a través de las consultas virtuales.

Sin embargo, lo cierto es que la práctica de la psicología online no está exenta de mitos y tabúes, incluso entre los propios profesionales. Y no es extraño. Desde que surgió la psicología como ciencia, hace casi tres siglos, los psicólogos han tratado a los pacientes en consultas presenciales. No ha sido hasta hace aproximadamente una década que la tecnología ha irrumpido en nuestras vidas, instando a los terapeutas a adaptarse a esta nueva realidad que ha cambiado toda nuestra vida social. De ahí que aún queden numerosas creencias, muchas de ellas erradas, sobre la terapia online y sus beneficios para los profesionales de la psicología.

Cinco falsas creencias sobre la terapia online

La terapia online está ganando cada vez más terreno entre los psicólogos, quienes aprovechan las oportunidades que brinda esta forma de consulta para ofrecer sus servicios profesionales a personas de cualquier parte del mundo y en cualquier momento. Sin embargo, aunque la confianza en esta modalidad terapéutica crece paulatinamente, aún existen muchas creencias falsas y desconocimiento en torno a sus beneficios y utilidades que se deben superar. He aquí algunas de las falsas creencias más comunes entre los profesionales sobre la terapia online.  

1. La terapia online no es igual de efectiva que la presencial

No hay evidencia científica al respecto, de hecho, a través de la terapia online también se puede brindar una consulta psicológica de calidad. La psicoterapia virtual se desarrolla básicamente de la misma manera que la presencial, con la única diferencia de que, en lugar de ser una mesa la que separa al psicólogo del paciente, es una pantalla. En la psicología online se pueden utilizar los mismos recursos, técnicas y tratamientos que se emplean en la práctica presencial. Y los resultados son muy similares.

Así lo reveló una encuesta estadounidense realizada a 1000 personas que recibían psicoterapia online en la que el 93% de los participantes creía que estaba siendo realmente eficaz mientras que el 91% consideraba que más personas debían probar esta nueva modalidad. Asimismo, otro estudio realizado en Estados Unidos corroboró que los pacientes que reciben terapia online consiguen resultados muy similares a los que asisten a una terapia presencial.

2. La terapia online solo está concebida para hacer consultas individuales

Otra falsa creencia muy extendida sobre la terapia online hace referencia a que sólo es posible realizar consultas individuales a través de esta modalidad terapéutica. Sin embargo, se trata de una creencia errónea. Si bien es cierto que muchos psicólogos prefieren las consultas individuales online ya que se sienten más cómodos trabajando con una sola persona, eso no significa que no puedan realizarse otro tipo de intervenciones, como la terapia de pareja o una intervención familiar.

Al no contar con barreras físicas, la psicología online es una modalidad ideal para incluir a más de una persona en el proceso terapéutico. De hecho, en ocasiones puede convertirse en una de sus mayores ventajas como, por ejemplo, en los casos de divorcio o el trabajo con familias disfuncionales donde es muy fácil que surjan conflictos que pueden ser más fáciles de gestionar por el psicólogo a través de una pantalla.  

3. La terapia online no es segura ni garantiza la privacidad del paciente

Teniendo en cuenta que los ataques de hackers y filtraciones de datos personales han aumentado considerablemente en los últimos años, no es extraño que muchas personas, incluidos los psicólogos, crean que la terapia online no es segura. Sin embargo, lo cierto es que si en lugar de recurrir a plataformas públicas como Zoom o Skype se utilizan plataformas de comunicación encriptada como la de Therapyside es posible garantizar una consulta segura y con privacidad absoluta.

A diferencia de los encuentros presenciales, las sesiones online tienen el plus de que deben cumplir con la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y la garantía de los derechos digitales que protege el contenido online, de lo cual se encargan las plataformas de terapia online. Y, además, al igual que las sesiones presenciales, las consultas de terapia online están sujetas al código de ética del colegio de psicólogos que exige preservar la privacidad e intimidad de los pacientes, lo que significa que está en manos del psicólogo mantener a buen recaudo los datos o el contenido de las sesiones y evitar revelar esa información a terceros.

4. En la terapia online no se establece una buena relación terapéutica

Otra de las creencias erróneas más comunes sobre la terapia online está relacionada con el establecimiento del rapport con el paciente. Si bien es cierto que la terapia online carece del contacto físico que brinda una consulta presencial, la verdad es que esto no afecta a la creación de una buena relación terapéutica y de un clima de confianza con el paciente ya que promueve la empatía digital. De hecho, según un estudio italiano los pacientes que han probado las consultas online refieren empatizar mejor y sentirse más apoyados por su terapeuta en el entorno virtual que en persona.

Lo que sucede es que muchos de los pacientes se sienten más cómodos hablando desde la seguridad y el confort que les brinda su hogar por lo que les resulta más fácil conectar con su terapeuta. Así lo corroboró un estudio alemán en el que se encontró que la adherencia al tratamiento de los pacientes que recibían terapia online era mayor que la de aquellos que acudían a un psicólogo presencial.

5. A través de la terapia online no se puede ofrecer un tratamiento de calidad

Se trata de otra de las creencias más comunes sobre la terapia online. Sin embargo, lo cierto es que la mayoría de las técnicas y métodos que utiliza el psicólogo durante su práctica clínica funcionan lo mismo en una consulta presencial que online. Esto significa que la calidad de un tratamiento psicológico no depende de la modalidad terapéutica, online o presencial, sino en la destreza del terapeuta para diseñar y aplicar el mejor tratamiento en cada caso.

Las cifras así lo demuestran. Según una encuesta realizada en Estados Unidos, el 90% de las personas que acuden a psicoterapia online se siente satisfecha con la calidad de las sesiones y los resultados que consiguen.  

¿Por qué es importante desmitificar la terapia online?

Aferrarse a mitos y creencias erróneas sobre la psicología online puede limitar las oportunidades de crecimiento profesional que ofrece esta modalidad terapéutica y dejar un paso por detrás a los profesionales que retrasan su adaptación a los nuevos tiempos. En cambio, cuando nos abrimos a conocer cómo funciona realmente la terapia online y descubrimos todas las ventajas y los beneficios que reporta, no solo actualizamos nuestros métodos de trabajo sino que nos preparamos para ir un paso más allá en nuestra profesión.

Y es que bien empleada, la terapia online puede convertirse en un medio para expandir la práctica clínica y tratar a personas de cualquier parte del mundo desde la comodidad del hogar o un pequeño despacho. Una ventaja que puede ahorrar tiempo y dinero en desplazamientos y mantenimiento de una consulta física, a la vez que permite asumir un mayor número de pacientes sin sobrecargar la agenda ya que facilita la compatibilización de la práctica clínica con otras funciones.

Ya sea como terapia complementaria o única, la psicología online también brinda la posibilidad de acortar distancias con el paciente debido a que permite una interacción más inmediata que no solo beneficia al tratamiento sino que puede mejorar la adherencia terapéutica. De hecho, una de sus ventajas es que permite dar seguimiento con más facilidad a un tratamiento psicológico, sobre todo en los casos de pacientes con estrés, depresión o ansiedad.

Por tanto, más allá de centrarnos en las limitaciones o adaptaciones que requiere una consulta online, es momento de poner el foco en las oportunidades que brinda y en sus beneficios a largo plazo. A fin de cuenta, se trata de una modalidad terapéutica que promete facilitar la vida tanto al paciente como al psicólogo sin comprometer la eficacia y los resultados a los que estamos acostumbrados con la terapia psicológica tradicional.

El medio online no es la diferencia es el valor.

Enriquece tu práctica sanitaria dedicándote a lo que mejor sabes hacer, nosotros nos encargamos del resto. Con Therapyside podrás ofrecer terapia online de forma fácil, segura y confidencial.

Referencias:

Lippke, S. et. Al. (2021) Adherence With Online Therapy vs Face-to-Face Therapy and With Online Therapy vs Care as Usual: Secondary Analysis of Two Randomized Controlled Trials. Journal of Medical Internet Research, 23(11):e31274.

Sperandeo, R. et. Al. (2021) Exploring the Question: “Does Empathy Work in the Same Way in Online and In-Person Therapeutic Settings?”.  Frontiers in Psychology, 12: 671790.

(2020) Patients with Depression and Anxiety Surge as Psychologists Respond to the Coronavirus Pandemic. American Psychological Association.

Spiegel, B. (2020) A Verywell Report: Americans Find Strength in Online Therapy. Verywell mind.

Gros, D. et. Al. (2011) Exposure therapy for PTSD delivered to veterans via telehealth: predictors of treatment completion and outcome and comparison to treatment delivered in person. Behavior therapy, 42(2): 276-283.

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